118 Flujos BIM Low Cost
Nuestros gastos en software para un proyecto BIM están en una espiral descontrolada: modeladores, softwares de ofimática ordinaria, retoque fotográfico, cálculo estructural, diseño MEP, gestión de clientes y proyectos… ¿Cómo podemos reducir nuestro gasto en software? ¿El software gratuito o low cost es una alternativa fiable? ¿Hay alternativas para flujos BIM low cost? ¡Bienvenido al episodio 118 de BIMrras! En julio de 2022 Slack anunciaba cambios en su política de precios y en sus condiciones para el tramo gratuito de su servicio de mensajería. Hablamos de Slack porque lo considerábamos una herramienta BIM importante para garantizar lo que Manuel García Navas define como Trazabilidad de las comunicaciones BIM, en contraste con Whatsapp, que con todo el cariño del mundo, es una herramienta para uso no profesional. Trazabilidad que, como demostrábamos en nuestro episodio 90, no queda garantizada tampoco con el correo electrónico. Hasta septiembre de 2022 Slack permitía crear tantos espacios de trabajo, grupos de comunicación, servidores como quisieras, con el único límite de que superados los 10.000 mensajes tendrías que pasar por caja para poder acceder a los más antiguos. Peeeeeero, de repente en este comunicado de julio, Slack cambia las reglas del juego y decide que, en el plan gratuito, no vas a tener acceso a tus mensajes 90 días después de enviarlos si no pasas por caja. De repente en septiembre muchos BIM manager y muchos jefes de equipo se han visto con la sorpresa de que esto iba en serio y han corrido a quejarse de lo injusto que es que un producto gratuito cambie sus condiciones y bla, bla, bla, al tiempo que corrían a la búsqueda de flujos BIM low cost. Así que en este episodio vamos a desgranar cómo y cuándo emplear herramientas gratuitas en nuestros flujos de trabajo BIM, qué tener en cuenta para confiar o no en esas herramientas, como planificar rutas de escape, y, sobre todo, vamos a contar algunas de las herramientas que usamos en nuestro día a día, que tienen por objeto abaratar un poco la extensa factura de software que soportamos en nuestras empresas.