DESCENDER NUNCA | Esteban Wiens
Si dejo nomas la cruz, ya no puedo seguirle. Si bajo de la cruz ya no estoy “juntamente crucificado con él”, y menos puedo decir “ya no vivo yo, sino Cristo en mi”, porque Cristo no se bajo de la cruz.
Si dejo nomas la cruz, ya no puedo seguirle. Si bajo de la cruz ya no estoy “juntamente crucificado con él”, y menos puedo decir “ya no vivo yo, sino Cristo en mi”, porque Cristo no se bajo de la cruz.