Pensé que era gratis

No hay forma de seguir a Jesús sin negarse a uno mismo; no hay perdón sin arrepentimiento; no hay salvación sin entrega. Sin embargo, en lugar de enfocar nuestra fe con un espíritu de renuncia que exprese: «¿Qué puedo hacer por Jesús?», hemos desarrollado una mentalidad socialista que pregunta: «¿Qué puede hacer Jesús por mí?» o lo que es peor: “Si lo sigo, ¿qué me va a dar?”. Si no ha habido sacrificio en tu vida, si al menos no te has sentido un poco incómodo por seguir al Señor, quizá no estés llevando tu cruz. ¡Un mensaje revelador!

Om Podcasten

Conferencista, influencer, actor y conductor de televisión.