Ser una superwoman es una mierda. Reflexionamos sin ser expertas en materia de la situación de la mujer actual.
El perfeccionismo, el querer llegar a todo, el ruido exterior...hace que las mujeres nos sintamos que vamos como pollo sin cabeza. Solo vivimos una vez y vamos pasando por distintas etapas. No tiene sentido vivir una vida donde no te de la vida. Hablamos de la maternidad, de entender de que no podemos con todo a la vez y que muchas veces tenemos que actuar en lo que sí depende de nosotras. Un episodio de pura reflexión de dos mujeres que dejaron las multinacionales y sus carreras brillantes porque se dieron cuenta de que eso no era el éxito para ellas, no tenía nada que ver con lo que realmente querían ellas y ahora son emprendedoras donde han aprendido a gestionar su tiempo, su energía y saber donde están los límites.