Encuentro Con Dios
Cuando somos llevados al desierto, no tenemos que desesperarnos ni angustiarnos. Dios nos llama, trata con nuestro corazón y nos transforma por medio de él.
Cuando somos llevados al desierto, no tenemos que desesperarnos ni angustiarnos. Dios nos llama, trata con nuestro corazón y nos transforma por medio de él.