Charles Spurgeon - El cántico de los ángeles
Charles Spurgeon (1834-1892) Bautista Inglés, sin educación formal, Spurgeon fue llamado a predicar en Londres a los 19 años de edad. La iglesia más tarde se convirtió en el Tabernáculo Metropolitano, donde ministró a 6,000 personas los domingos y llegó a ser muy querido. Spurgeon nació en Kelvedon, Essex, Inglaterra, el 19 de junio de 1834. Debido a que su padre y su abuelo eran pastores, Spurgeon fue criado con el conocimiento del evangelio. Sin embargo, no se convirtió hasta una nevada mañana de enero de 1850. En agosto del mismo año, Spurgeon predicó su primer sermón a una pequeña reunión de granjeros. Un año después, una iglesia del pueblo lo llamó como su pastor. En 1854, cuando tenía diecinueve años, fue instalado como pastor sobre el rebaño de la Capilla de New Park Street, Southwark, Londres, que más tarde se convirtió en el Tabernáculo Metropolitano. A partir de enero de 1855, los sermones de Spurgeon se publicaron semanalmente, una práctica que no cesó hasta 1916, veinticuatro años después de su muerte. Durante su pastorado en Londres, Spurgeon ministró a una congregación de casi 6,000 personas cada domingo, publicó sus sermones semanalmente y escribió una revista mensual. También fundó una universidad para pastores, dos orfanatos, un hogar para ancianos, una sociedad de colaboración y varias estaciones misioneras. El predicador más leído de la historia (aparte de los que se encuentran en las Escrituras). Hoy en día, hay más material escrito escrito por Spurgeon que por cualquier otro autor cristiano, vivo o muerto. Los sermones recopilados de Spurgeon durante su ministerio llenan 63 volúmenes. Los 20–25 millones de palabras de los sermones son equivalentes a los 27 volúmenes de la novena edición de la Enciclopedia Británica y representan el mayor conjunto de libros de un solo autor en la historia del cristianismo. Aunque el dolor sacudió su cuerpo en sus últimos años y los opositores atacaron su ministerio, Spurgeon continuó predicando el Evangelio hasta su muerte en enero de 1892. Las claves del éxito de Spurgeon fueron una vida de oración y una fe simple pero profunda en la gracia y el amor de su Señor y Salvador Jesucristo.